Beneficios de tener una mascota

La Terapia y Educación Asistida por Animales de Compañía intenta ayudar a personas que presentan cuadros de ansiedad, depresión, demencias y retrasos intelectuales a través del contacto con los animales de compañía. Puesto que para muchos tener una mascota es una forma de sociabilización, al encontrar un tema común con otras personas. Por supuesto, la terapia con animales en ningún caso sustituye a la medicina tradicional.

Las mascotas en la tercera edad

Muchas de las personas mayores que viven en una residencia, sufren problemas de dependencia física y psíquica. Esto provoca que en muchos casos se aíslen del mundo exterior debido a sus problemas de comunicación. Además los beneficios de convivir con animales están demostrados: reducen la ansiedad, dan consuelo y, según algunos estudios, rebajan la tensión arterial.

La experiencia de convivir con mascotas en las residencias geriátricas  cuenta con apenas una década de vida en nuestro país. El centro pionero se encuentra en Reus (Cataluña). Hace doce años llegó una pareja de Golden Retriever, gracias a ellos se han llevado a cabo terapias de grupo y se ha mejorado la comunicación entre los residentes, así como su sentido de la responsabilidad.

Los animales en las cárceles

En nuestro país la terapia asistida con animales en el sistema penitenciario aún es muy reciente y no está demasiado implantada.En Estados Unidos estas terapias son muy populares, puesto que en todas las cárceles se pueden encontrar numerosos animales de compañía que comparten su vida con los reclusos.

En este sentido una de las experiencias en España la encontramos en Orense.  Para desarrollar la experiencia se seleccionaron a siete presos con problemas de depresión y de falta de comunicación. Después de dos años, los reclusos han mejorado su estado de ánimo, son capaces de mantener relaciones sociales estables y se han vuelto más responsables y ordenados al tener que cuidar de los perros.  

Los gatos: los grandes olvidados

Hasta hemos visto que en la mayoría de las experiencias se usan perros. Para las personas mayores los felinos son ideales, puesto que no necesitan salir a la calle y son más tranquilos.

Otros usos de la terapia asistida con animales

Uno de los casos más significativos es la experiencia llevada a cabo en una escuela con niños autistas. A lo largo del estudio se ve como  niños que en un principio eran totalmente reticentes a la presencia del perro, acaban acostumbrándose a él e incluso dando muestras de cariño.

En conclusión, la terapia asistida con animales puede ser una herramienta muy eficaz, pero necesitamos que sea desarrollada por profesionales del campo de la psicología, la medicina y la psiquiatría. Asimismo, para llevarla a cabo debemos acudir a expertos en adiestramiento y veterinaria para hacer un estudio del tipo de animal y de la raza más adecuada.